Aluminio: las sales de aluminio
(Figuran como Aluminium chloride, Aluminium fluoride, Aluminium chlorohydrate, Aluminium chlorohydrex, Aluminium zirconium ) son utilizadas en desodorantes y antitranspirantes. Sospechosas de estar relacionados con el cáncer de mama y la enfermedad de Alzheimer. No confundir con la piedra de alumbre natural ( la genuina es Potassium Alum), ni con el óxido de aluminio.
Triclosán
Utilizado en desodorantes, limpiadores , desinfectantes de las manos… Se sospecha sobre los efectos negativos sobre la salud pudiendo afectar a la función muscular, cardiaca y actuar como disruptor endocrino.
Butilhidroxianisol (BHA) y Butilhidroxitolueno(BHT)
Conservantes y antioxidantes que se usan principalmente en maquillajes. El BHA es muy tóxico para el sistema inmunitario y cancerígeno. El BHT puede ser tóxico para la piel , pulmones e hígado. Estas sustancias pueden causar alergias e interferir en las funciones hormonales.
Pfelendiaminas
Colorantes que se utilizan para los tintes capilares. Suelen aparecer en la etiqueta del producto como CI seguido de un código de 5 dígitos. Se ha demostrado que estos compuestos derivados de alquitranes de carbón son cancerígenos.
Dietanolamina (DEA, MEA o TEA)
Utilizados para que los productos sean más espumosos o cremosos. Pueden irritan la piel y los ojos , pueden ser tóxicos para el sistema nervioso e inmunitario; pueden reaccionar con otros ingredientes de los productos de cosmética formando tóxicos cancerígenos.
Ftalatos (DEHP, BBP, DBP, BDP, DUP…)
Utilizados principalmente en productos para uñas y en perfumes; en Experimentos de laboratorio se ha demostrado que aunque no son cancerígenos por sí solos, sí puede aumentar la capacidad de otros químicos de causar mutaciones genéticas e interferir con las funciones hormonales.
Siloxanos
Utilizados en los cosméticos para suavizarlos, ablandarlos y humedecerlos, se sospecha que interfieren con las funciones hormonales y causan toxicidad en el hígado.
Las listas publicada en estos dos últimos artículos hacen referencia a algunos de los muchos ingredientes tóxicos presentes en productos cosméticos habituales. ¡No olvidéis leer las etiquetas de lo que adquirís!